Y el Goya de Honor es para…

Madrid, 1923

Es hijo, hermano, esposo, cuñado, padre y tío de actores, y él mismo trató de ser actor, pero Mariano Ozores pronto se dio cuenta de que lo suyo no era la interpretación. En 1948 encaminó sus pasos a la escritura, y realizó varios guiones humorísticos para sus padres y colaboró en la revista satírica La Codorniz. En 1952 fue contratado por Benito Perojo para la película Ché, qué loco, y hasta los años sesenta trabajó con el director y con Alfonso Paso en varias producciones. Con el inicio de las emisiones de TVE, donde llegó a ser nombrado director de programación, dirigió y presentó series, documentales y programas, como Aeropuerto Telefunken, en 1959.

Su primera película como director fue Las dos y media y veneno, escrita por Alfonso Paso y protagonizada por sus hermanos Antonio Ozores y José Luis Ozores, además de su cuñada Elisa Montes. A lo largo de su vida ha rodado 96 cintas que figuran entre las más taquilleras de la época, y ha dado grandes títulos de comedia al cine español.

Académico desde la fundación de la institución (su número de carnet es el 18), asegura merecer el Goya de Honor que en 2016 le ha otorgado la Academia: “creo que me lo merezco porque he hecho 96 películas que tuvieron una taquilla magnífica, llevaron al cine a cerca de 90 millones de espectadores. El Goya es un premio a la constancia”.

©Enrique Cidoncha

Durante cinco décadas rodó con los actores más famosos de cada época. Además de sus hermanos José Luis y Antonio, Mariano Ozores ha trabajado con José Luis López Vázquez, Alfredo Landa, Concha Velasco, Lina Morgan, Andrés Pajares, Fernando Esteso, Gracita Morales, Florinda Chico, Juanito Navarro, Paco Martínez Soria, Manolo Escobar, José Sacristán… “Tuve la gran suerte de trabajar con gente maravillosa, con unos cómicos que nunca pusieron una pega. Todos éramos amigos y compañeros y hablábamos de lo que nos gustaba, del cine. No mirábamos si uno era de izquierdas y otro de derechas. En España hay secundarios maravillosos que defienden su trabajo con muy pocos medios, lo que tiene un gran valor. Los actores son unos seres privilegiados, con un gesto cambian el estado de ánimo del personaje. Algo que no es fácil de encontrar, pero cuando das con uno de ellos es genial”.

Mariano Ozores ha parodiado lo que ha pasado en España, los cambios que se produjeron tras el franquismo, durante la transición y en los primeros compases de la democracia. Ha pulsado la actualidad en cada momento desde la comedia. “Lo que hacía era observar, vivir la España que nos tocaba; así hice ¡Que vienen los socialistas!, Operación secretaria… títulos que eran un retrato de lo que estábamos viviendo. Era la vida misma, lo que se comentaba en la calle, en los bares, en la familia… “.

Su filmografía abarca títulos como Objetivo Bi–Ki–Ni, ¡Cómo está el servicio!, El abuelo tiene un plan, Jenaro el de los 14, Los bingueros, Yo hice a Roque III, Al este del oeste, El liguero mágico, ¡Qué gozada de divorcio!, El apolítico, Manolo la nuit, Fin de semana al desnudo o El currante.

En los últimos ochenta y primeros noventa dirige sus últimas películas, en las que retrata la actualidad política del momento, parodiando casos de corrupción y escándalos sociales y económicos: Esto es un atraco, Hacienda somos casi todos, Jet Marbella set y Pelotazo nacional.

Mariano Ozores, Pedro Olea, José Luis López Vázquez y Concha Velasco